Limpieza
Los 3 hábitos de organización y limpieza que tienen las personas felices, según expertos
El orden y la limpieza también pueden influir en el estado mental.Tener una rutina organizada y de limpieza es la clave para mantener una higiene adecuada en el hogar, pero lo cierto es que también pueden influir en la salud mental. Por lo tanto, según expertos en psicología, las personas felices suelen tener tres hábitos clave de organización, y aquí te diremos cuáles son.
La psicología explica que la limpieza en el hogar también influye en el estado de salud mental de las personas, de manera que existen tres hábitos que se pueden seguir para tener mayor felicidad, pues estudios reflejan que son los que suelen seguir las personas más felices.
¿Cómo influye la limpieza y la organización en la felicidad?
Según la psicología, la limpieza y la organización del hogar son dos factores clave para que las personas se sientan relajadas y con un nivel de estrés más bajo; de esta forma, un estudio explica que quienes viven en casas o departamentos desorganizados tienden a procrastinar y a sentirse insatisfechos con su vida.
Asimismo, una investigación publicada en The Journal of Neuroscience señala que cuando hay un ambiente de desorden el cerebro tiene mayor dificultad para concentrarse, además de que también tiene a sufrir de fatiga, depresión y estrés, esto último debido a que la falta de organización también aumenta el cortisol, la hormona que aumenta este estado de preocupación y tensión mental.
Finalmente, un estudio enfocado en los patrones de estado de ánimo y el cortisol, el cual fue realizado a varios grupos de personas, señaló que el 61% de quienes participaron en el experimento se sentían menos estresadas después de hacer limpieza; en contraste, el resultado mostró que el 54% de ellos estaban mucho más relajados.
Los 3 hábitos de las personas felices
En general, la psicología establece que existen tres hábitos de organización y limpieza que siguen las personas más felices, los cuales son:
1. Rutina de limpieza general
Una rutina puede incluir hacer una repartición de la limpieza en diferentes días; es decir, no pretender hacer todo en una sola jornada, sino clasificar y ordenar las tareas por hacer según su frecuencia. Por ejemplo, hay actividades que se deben hacer diariamente, como lavar los platos o hacer la cama, pero hay otras que pueden dejarse para un día a la semana, como aspirar la alfombra o lavar las sábanas.
2. Hábitos de organización sencillos
Uno de los hábitos puede incluir dedicar algunos minutos al día a hacer actividades de manera más superficial, como ordenar las habitaciones o lavar el plato sucio que quedó pendiente de la cena. Los expertos señalan que lo ideal es hacerlo por la noche, antes de dormir, pues de esta forma se sentirá la tranquilidad de descansar en un espacio limpio y, además, se levantará con la misma sensación.
3. Tirar lo que no se usa
Acumular cosas que no se usan, como la ropa, puede ser un factor que da sensación de desorden y suciedad, por lo que los expertos recomiendan separar y desechar una vez al año lo que no se usa, pues al tener menos acumulación se sentirá más ordenado el espacio.
vcz.