En el sur de Chiapas existe un lugar que parece transportarte directamente a Japón. Se trata de Acacoyagua, un pequeño municipio conocido como “Lugar de grandes señores”, que guarda entre sus calles, festivales y tradiciones, la huella de los migrantes japoneses que llegaron a México durante el Porfiriato.
La historia comenzó a finales del siglo XIX, cuando Japón y México establecieron relaciones diplomáticas en nombre del progreso. La primera colonia japonesa, llamada Colonia Enomoto, se asentó en Acacoyagua.
Aunque la mayoría de los migrantes regresó a Japón, seis jóvenes agrónomos decidieron quedarse, dando inicio a una comunidad que hoy suma más de 76 mil descendientes, conocidos como nikkei.
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¿Qué festivales y costumbres japonesas se celebran todavía en este pintoresco municipio chiapaneco?
A lo largo del siglo XX, llegaron nuevas oleadas de migrantes japoneses, consolidando la presencia nipona en la región. Hoy, Acacoyagua se distingue por su limpieza, los murales coloridos con banderas y caracteres japoneses y por la celebración de festivales tradicionales como el Matsuri, donde los habitantes visten yukata y decoran la presidencia municipal con monumentos sintoístas y figuras de origami.
¿Dónde se encuentra el Parque Cultural Enomoto y que honra en México?
El Parque Cultural Enomoto, inaugurado en 1968 frente a la presidencia municipal, rinde homenaje a estos pioneros.
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Su obelisco central, decorado con caracteres dorados estilo haiku japonés, recuerda la lucha y los sueños de quienes llegaron a estas tierras: "Acá, donde solamente florecen las hierbas de verano, es donde lucharon los guerreros y soñaron con triunfar en la vida”.
De este modo, visitar Acacoyagua es más que un recorrido turístico, es sumergirse en un pedacito de Japón en el corazón de Chiapas, donde historia, cultura y tradición se entrelazan en cada esquina.
